Por Tulio Sánchez
LOS ALCARRIZOS, SANTO DOMINGO.- Las aguas residuales que emanan de un complejo habitacional del Instituto Nacional de la vivienda -INVI-, inaugurado hace varios meses por el presidente de la República, Danilo Medina, están provocando afecciones en la piel y otras enfermedades entre la población infantil y adulta, que residen en el humilde sector La Nueva Esperanza, del municipio de Los Alcarrizos.
De acuerdo al dirigente comunitario, Miguel Terrero, los ingenieros encargados de la construcción de esos apartamentos no contemplaron la construcción de pozos filtrantes para canalizar las aguas de los baños y que según dijeron sólo construyeron dos plantas de tratamientos, las cuales nunca fueron puestas en funcionamiento.
Puntualizó que debido a la falta de esas plantas de tratamiento, las aguas pestilentes, acompañadas de heces fecales, corren constantemente por varias calles de la humilde barriada, e incluso la situación se hace más insoportable, cuando el agua llega al complejo habitacional, que está colindante con la humilde barriada.
El también presidente de la Fundación para el Mejoramiento de los Envejecientes Dominicanos-FUMEDO-, dijo que se han cansado de visitar en comisión al INVI, donde depositaron varias denuncias del caso, quienes a través del Ingeniero Porfirio, les prometieron resolver la problemáticas del barrio, pero hasta el momento se han quedado esperando a las autoridades de la señalada institución estatal.
Terrero, deplora la actitud indolente mostrada por los ingenieros que construyeron ese complejo habitacional, y por ellos están pagando las consecuencias decenas de niños y adultos, que padecen enfermedades de la piel, paños, llagas y erupciones en el cuerpo, fruto de las aguas negras malolientes, que afectan a todas horas del día y la noche.
El activista comunitario, anunció que en los próximos iniciaran un plan de lucha y movilizaciones callejeras, hasta tanto las autoridades correspondientes no atiendan sus reclamos.
Mientras que la doméstica Isabel Valerio, residentes en el lugar precisó que entre las calles, que ya han sido ocupadas por las aguas residuales pestilentes, se encuentra la principal, así como la segunda y otras vías adyacentes del sector, lo que ha provocado brotes de enfermedades de la piel, principalmente entre los niños, por lo que le hizo un llamado al presidente de la república Danilo Medina, para ordene a las autoridades del INVI, corregir esa situación, lo más rápido posible.
De su lado, Pedro Frías, dijo que tienen alrededor de dos años luchando contra esa situación, por lo que lamentó que las dos supuestas plantas de tratamiento nunca han funcionado, y todas las aguas de los baños e inodoros de los mas de 160 apartamentos vienen desembocar en las calles del barrio que fue fundado primero que ese complejo habitacional.
Mientras que la señora, Isabel Valerio adquirió un hongo y una bacteria en sus piernas, pidió que se resuelva ya, el problema de esas aguas pestilentes, ya las mismas penetran a sus hogares y sus niños se bañan ahí en creencia de que es un «río», por lo que ya han tenido que ser ingresados en centros de salud cercanos.
Otros lugareños del entorno también se quejaron de que nunca han recibido la visita de las autoridades locales de salud, llámese hospital Vinicio Calventi, Área VIII, ni tampoco del hospital municipal Alcarrizos II.