El expresidente Hipólito Mejía al parecer ha perdido la memoria, pues el día de ayer envió una carta a todos los medios de comunicación en la que pide al presidente Danilo Medina violar la Ley Sectorial de Áreas Protegidas (202-04) aprobada por el propio expresidente, y permitir la agricultura dentro del Parque Nacional Valle Nuevo. Pide el exmandatario que se antepongan intereses individuales al interés colectivo.
Hoy nos despertamos con la noticia de que fue el propio Hipólito Mejía quien seis días antes de abandonar el cargo, el 10 de agosto de 2004, compró a nombre del Estado dominicano unos terrenos dentro de Valle Nuevo que pertenecían a miembros de la familia Guzmán, tradicional familia de dirigentes perredeístas y allegados al expresidente.
Mientras Hipólito pide al presidente Medina que viole la Ley Sectorial de Áreas Protegidas, aprobada en su gestión, él mismo tuvo a bien declarar de utilidad pública y pagar RD$243 millones por terrenos a terratenientes allegados a él justo antes de salir del gobierno.
Resulta curioso que el mismo presidente que aprobó la ley 202-04 sea el que pida que se viole la misma. Es sospechosa esa «solidaridad» que desconoce que desde la entrada en vigor de la Ley 64-00 de Medio Ambiente (justo el año que él inició su periodo presidencial) es ilegal la agricultura dentro de Valle Nuevo, y que los terratenientes y ocupantes ilegales han tenido DIECISÉIS años para enmendar su situación de violación a la Ley. Más sospechoso es que el propio Hipólito no haya hecho nada durante su mandato para resolver la situación crítica de Madre de las Aguas, y hoy pida que se viole la ley, en lugar de apoyar el rescate de un Parque Nacional de vital importancia para la supervivencia de los dominicanos.
Olvida Hipólito que de ahí nace el agua para producir alimentos, actividad que él tanto dice valorar. Resulta llamativo además que el expresidente utilice los mismos argumentos esgrimidos por la familia Guzmán en su campaña mediática contra el plan de rescate de Valle Nuevo. Sí, esa familia Guzmán a la que él benefició con la compra de terrenos.
El expresidente debe reflexionar. No solo no hizo cumplir la ley de medio ambiente en Valle Nuevo durante su mandato, cabe recordar que en 2004 intentó mutilar el Sistema Nacional de Áreas Protegidas, en específico sacando Bahía de las Águilas y Parque del Este del proyecto de ley, para destinarlo a proyectos hoteleros de empresarios nacionales y extranjeros. Si no lo logró, fue por la intensa oposición de los ambientalistas y de organizaciones nacionales y extranjeras.
Pero más aún y volviendo a Valle Nuevo, tampoco es ocioso recordar que su entonces Secretario de las Fuerzas Armadas fue el promotor de Rancho Guaraguao, complejo de lujosas casas de campo que ha avanzado dentro del Parque Nacional, desmontando el bosque a su paso.
No nos engañemos. Con este historial y sus recientes declaraciones: ¿A quién defiende el expresidente? ¿A unos pocos o a todo el país?
Fuente: SOS Ambiente RD