MADRID, ESPAÑA, (ABC).- La analista de escritura manual Sheila Lowe y el profesor de primaria Michael Fernández han analizado para CNN.com la caligrafía de la firma del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Se han basado en las fotografías difundidas por todo el mundo de la firma de importantes documentos. Entre ellos, varias órdenes ejecutivas para reforzar las fuerzas armadas de EE.UU. y, sobre todo, el polémico veto migratorio a siete países y que en seguida ha sido bloqueado por el poder judicial estadounidense.
Según Sheila Lowe, el alargado, contundente y regular trazado de la firma tiene la «calidad de una reja de alambre de púas». Considera que «no hay nada amigable o abierto sobre esta firma».
Al margen de eso, la altura de los trazos más amplios esconde otra reveladora información: «La gran altura de las mayúsculas, junto con el diseño extremadamente angular de la letra, muestran a una persona que está impresionada por su propio poder».
Michael Fernández alabó la «pulcritud» de la caligrafía de Trump, pero criticó la forma de letras del presidente, puesto que, en su opinión: «Hace caso omiso al alfabeto en favor de un sismógrafo».
La grafóloga Sandra Cerro, destacó en RT.com la forma angulosa de la firma. En su opinión, la forma en general de la rúbrica es bastante angulosa, «marcando lo que llamamos ‘dientes de sierra’, que son esos ángulos tan pronunciados».
La firma del «clásico líder dictatorial»
Por otro lado, ha considerado que la presión del escrito «es firme» y «marca mucho la ejecución en el eje vertical». Asimismo, la velocidad del texto «es bastante controlada, precisamente porque está frenando con esa inclinación tan vertical y marcando tanto el eje de arriba a abajo», explicó.
¿Qué quiere decir eso? Según Cerro, que Trump es «el clásico líder dictatorial de tipo coercitivo»: «Es el líder del yo ordeno y yo mando, más autoafirmador que realizador, que demanda ser el centro de atenciones, y que requiere obediencia inmediata y sumisión por parte de sus subordinados».
Según la experta, los líderes autoritarios suelen tener firmas con una cierta profusión de ángulos, lo que remarca «un temperamento muy fuerte», «de criterios inflexibles»: «Es una persona intransigente, le cuesta ser flexible a la hora de respetar las opiniones y los criterios de los demás».
Otros grafólogos que también han analizado la firma de Trump han coincidido con este análisis. Según ellos, la predominancia de ángulos, «habla de sujetos energéticos, firmes en sus decisiones, con tendencias agresivas, radicales e intolerantes».
Por eso, sugieren que esa firma le pertenece a una persona testaruda, que disfruta de los retos que se propone, obstinada y competitiva. En el lado negativo, destacan una gran carga de agresividad,un ego exacerbado y una tendencia a ocultar detalles de su personalidad, reaccionar a la defensiva y contar con niveles muy bajos de autocontrol. Todo esto se relaciona además con personas autoritarias, hostiles e irritables.