Dámaris F. Pérez Abreu
El peor evento del COVID-19 es la «tormenta de citoquinas», hiperreactividad del sistema inmunológico causado por altos niveles de interleuquina 6 ó IL-6 que produce inflamación en los pulmones, lo que impide el paso de oxígeno a la sangre. El famoso y costoso medicamento Tocilizumab, llamado por el Ministro de Salud como medicamento de alto costo y que ha sido usado en la República Dominicana en varios casos de personas afectadas por el COVID-19, lo que hace es bloquear esa interleucina. Pero como es un medicamento peligroso no se puede usar por cuenta propia, y cuando el paciente llega a ser tratado por un médico puede ser muy tarde (mas con este sistema de salud colapsado). Existen hierbas que controlan esa interleucina 6, y que como no tienen efectos adversos a dosis adecuadas, puedes comenzar a usarlas tan pronto te sientes en riesgo.
Ante esta situación te propongo el uso del tomillo, thymus vulgaris. Los principales compuestos presentes en el tomillo son: 1,8 cineol, timol, alcanfor, borneol y carvacrol.
Se ha demostrado que el carvacrol y el timol extraídos del tomillo disminuyen los niveles de las citocinas proinflamatorias IL-1β, IL-6 y TNF- α. El borneol, otro compuesto presente en el tomillo, también se ha descrito como un antiinflamatorio, ya que su suplementación dietética disminuye significativamente la concentración de las citocinas proinflamatorias IL-1 β e IL-6 en ratones. Pero del tomillo también se ha comprobado el efecto potenciador de la secreción antiinflamatoria de citocinas IL-10. Es decir, que el tomillo es un inmunoregulador.
El tomillo se ha usado en la medicina tradicional para el tratamiento de varias enfermedades respiratorias como el asma y la bronquitis, gracias a sus propiedades como antiséptico, antiespasmódico, antimicrobiano, antitusivo, antifúngico, antioxidante y antiviral. Los aceites de tomillo también se han descrito como un bactericida fuerte contra las bacterias Gram-positivas y Gram-negativas y también como un broncoespasmolítico, lo que lo hace una gran opción en casos de neumonía como la que puede producir el COVID-19.
Ante esta crisis que estamos enfrentado, y dado el colapso de nuestros hospitales, no tenemos más alternativa que agenciarnos nosotros mismos. Mientras consigues que te hagan la prueba (si es que la consigues), atiéndete. No te dejes morir esperando. El COVID-19 también nos enseña a confiar en la Madre Naturaleza.
Modo de uso: Una cucharada de tomillo por taza de agua en infusión, 3 veces al día.
Nuestra investigación se fundamenta en datos científicos extraídos de este artículo de investigación científica: Efectos de los aceites de extracto de tomillo (de Thymus vulgaris , Thymus zygis y Thymus hyemalis ) en la producción de citocinas y la expresión génica de macrófagos THP-1 estimulados con oxLDL.
Seguiremos analizando otras opciones.