SANTO DOMINGO, República Dominicana.-  El médico neurocirujano Brady de Las Nueces de 27 años de edad, en una entrevista realizada en Somos Pueblo, desveló una mafia que existe para poder optar por una plaza de residencia médica de neurocirugía, que inicia con la venta de exámenes para optar por las plazas que se realizan cada año, en contubernio con personal del área de tecnología de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

Reveló que el médico que quiera hacer una residencia de neurocirugía, otorrinolaringología, cirugía plástica debe tener acceso al dinero para poder comprar, de lo contrario no entra a la especialidad. Dijo que pagó 250 mil pesos por el examen, cuyas repuestas fueron enviadas por un mensaje de whatsapp.

“Eso es muy sencillo, usted paga 250 mil pesos, lo que ellos hacen es que tienen un contacto dentro de la UASD, que le filtra el examen 15 y 20 minutos después de haber iniciado, entonces a mí me llega un mensaje a unos celulares muy específicos que nosotros comprábamos por Amazon, cada celular vale entre 120 y 125 dólares, y obviamente teníamos la voluntad del jurado comprado, le llevábamos el dinero en efectivo, él te daba el link para comprar los teléfonos, y te decía la dinámica del proyecto (entramado), y te decían claro que si tú denunciabas algo te ibas abajo con ellos porque eso es asociación de malhechores”, relató.

Este examen nacional único de residencias médicas que se realiza el primer domingo de marzo de cada año se realiza en la UASD. Dijo, que este negoció lo inició el médico psiquiatra vegano, Lenin Antonio Núñez Gil, quien se desempeña como jefe de los residentes de psiquiatría Hospital Dr Francisco E. Moscoso Puello.

El doctor Brady de Las Nueces quien actualmente reside en los Estados Unidos, es egresado con honores de la Pontifica Universidad Católica Madre y Maestra, Santiago (2012-2018).

Manifestó que luego de pagar por el examen, hay que volver a pagar por la plaza. Pero además hace falta tener buenas relaciones políticas para obtenerla. De las Nueces, alegó que pudo llegar hasta el doctor Peña debido a las relaciones que tenía en el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), organización gobernante en el país en ese entonces, y éste a través del pago le hizo ganarle la plaza médica a la doctora Elizabeth Bejarán que era una contendiente superior.

Expresó que le explicó la situación al doctor y le dijo que tenía que ganar esa plaza, porque era de Santiago no quería ir para la capital a hacerla, y él me dijo, que no había ningún problema, que buscara medio millón de pesos.

Detalló que, a través de su madre, pagó 500 mil pesos al doctor Bienvenido Peña Jiménez, ex director de Residencias Médicas de Ministerio de Salud por la plaza de residencia de neurocirugía en el Hospital Regional Universitario Dr. Cabral y Báez.

Explicó que su forma de ser tan frontal y franca le acarreó muchos conflictos, pues cada irregularidad estaba denunciándola. Declaró que ese entramado es tan grande y poderoso que tuvo que abandonar la especialidad y marcharse hacia Estados Unidos, ya que él es ciudadano norteamericano.