Antonio Tosto
En el mundo entero se conocen, hasta la fecha, unas 45,000 especies de arañas pero según algunos aracnólogos podrían existir más de 450,000, eso demuestra lo poco que se han estudiado, tan solo un 10% ! En nuestra isla se han reportado poco mas de 400 especies, quizás un 60% de las que tenemos en realidad. Se dicen muchas cosas sobre las arañas, hay muchos falsos mitos y creencias, es divertido a veces escuchar estos cuentos de parte de ancianos y campesinos, a pesar de que hasta los mas jóvenes a veces creen todo lo que escuchan, pero a la vez es muy lamentable que exista tan poca información y que haya tanta ignorancia sobre el tema.
Aún después de 29 años que tengo viviendo en el país me sorprendo cada día escuchando historias y anécdotas sobre estos animales, por ejemplo todos creen que las cacatas saltan muy alto para atacarnos ! WOW !!! Ni la ciencia ha podido demostrar que estos animales quieran competir con las ranas y los grillos ! Pero si existen otras arañas que poseen las características morfológicas para poder saltar, estas son las pequeñas e inofensivas saltarinas que pertenecen a una familia llamada Salticidae y pueden saltar hasta 40 veces su propio tamaño. Las cacatas no pueden saltar porque su morfología no le permite tal comportamiento. Lo que pueden hacer es tirar patadas como los gatos y hacer movimientos bruscos para morder en caso de que se les moleste mucho.
Todos los casos de mordedura son puramente accidentales, por ejemplo pisar una sin querer, encontrarse una en un zapato, debajo de una piedra o un tronco donde inadvertidamente ponemos las manos. El asunto es que ninguna araña nos busca para mordernos, ellas solo buscan alimento y nosotros, los humanos, no somos parte de su dieta, pues se alimentan principalmente de insectos como cucarachas, grillos, moscas, mosquitos etc.
Las cacatas de buen tamaño también pueden atrapar ratoncitos, lagartos, aves y pequeñas serpientes. Representan una parte muy importante en la cadena alimenticia y son un excelente control de plagas, mejor que los insecticidas ! Las cacatas que de noche salen a ‘pasear’ y que encontramos frecuentemente en los campos y en las calles cerca de los montes que rodean ciudades y pueblos, son casi siempre machos en búsqueda de una hembra para aparearse, siguiendo de esta manera el ciclo natural de su presencia en el ecosistema.
Cuando pensamos en arañas siempre las asociamos al peligro de su veneno, pero no hay que preocuparse tanto, de hecho de las 113 familias que existen una sola carece de dichas glándulas, pero en el mundo entero las especies peligrosas, comparadas con la cantidad que se conocen, representan menos de una milésima parte.
En nuestro país existen las siguientes especies de importancia médica, la viuda negra (Latrodectus mactans), la Viuda marrón (Latrodectus geometricus), ambas de la familia Theridiidae, su veneno es de acción neurotóxica, afecta al sistema nervioso y a los órganos como corazón, pulmones, hígado etc… Solo puede ser letal en personas con problemas de salud o niños y ancianos. Tenemos tres especies de arañas violín, familia Sicariidae, sus nombres son Loxosceles taíno, L. caribbaea y L. cubana, su veneno produce necrósis de los tejidos, si no se toman precauciones inmediatas puede provocar gangrena y a veces hay que recurrir a la amputación del área afectada, pero ninguna es letal.
También tenemos una pequeña araña amarilla que vive entre la vegetación llamada Cheiracanthium inclusum, de la familia Eutichuridae, esta ultima posee un veneno muy complejo, compuesto de 9 diferentes toxinas, de acción neuro tóxica y al mismo tiempo necrótica, no es tan fuerte pero puede provocar pequeñas necrosis o hematomas y si una persona es alérgica puede sufrir shock anafiláctico.
En casos de mordeduras siempre es aconsejable capturar el espécimen y llevarlo consigo a emergencia para ser identificado por un profesional, ser atendidos de la manera correcta y no correr peligros mayores, las cosas se agravan cuando la herida no se atiende a tiempo, las bacterias pueden causar infecciones de mayor consecuencia.
Tampoco es alarmante el hecho de tener arañas de importancia médica en nuestro país, ninguna ha sido introducida excepto la viuda marrón que llegó desde África durante la colonización, las otras especies son nativas, siempre hemos vivido con ellas y los casos de mordeduras son muy escasos, así que tratemos de perder el miedo y ayudémoslas a vivir tranquilas en su ambiente natural, sin alterar este ciclo biológico que ha sido diseñado tan perfecto por nuestra madre naturaleza!