Sacerdote Carlos Piantini.

 

SANTO DOMINGO, R.D.(DL).– El sacerdote Carlos Piantini, de la parroquia María Auxiliadora, dijo que el Gobierno bota pus por donde quiera “que se punche” y no puso en dudas de que su traslado a Puerto Rico sea obra del Gobierno.

Agregó que se lleva un corazón Verde y llamó a todo el pueblo dominicano a jugar su rol como sociedad.

Dijo que la sociedad tiene muchos reclamos y no puede seguir así. “Esta corrupción está acabando con nuestro país, entonces hay que mantenerse firme y aglutinar todos los sectores, que todos nos unamos como buenos dominicanos en la lucha contra todos los males que nos afectan”.

Piantini habló luego de su última misa, que ofició en la Parroquia María Auxiliadora y previo a partir en la tarde de este domingo a Puerto Rico.

Expresó su preocupación, porque a su juicio, desde el Gobierno se está acabando con el país y pidió a la población que no se deje comprar con postura y prebendas insignificantes y que mantengan firmes el principio y recuperar el sueño de Juan Pablo Duarte.

“Tenemos que ir ahí donde está el problema, tenemos que cambiar esta casta mafiosa, corrupta y de todo. Todo esto hay que cambiarlo, pero debe ser el pueblo que vaya haciendo procesos, que vaya empoderándose, así como lo está haciendo con la Marcha Verde, eso es un empoderamiento del pueblo ante los males que hay que acabar”, dijo.

Diario Libre preguntó a Piantini su opinión en torno de algunos dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que piden la reelección del presidente Danilo Medina y respondió que esto es un signo de que no están en lo que tienen que estar. “Nosotros lo que estamos haciendo es llamando a la sociedad a que cumpla su rol que dejen de estar hablando disparates”, enfatizó.

Expresó que para él fue una sorpresa su traslado y dijo que se enteró de esto hace una semana. “Pero me voy con el corazón verde”, agregó.

En tanto, el diputado Fidelio Despradel acusó al Gobierno de ejercer presiones en la cúpula de la iglesia para que trasladaran a Puerto Rico al padre Carlos Piantini.