NUEVA YORK, EEUU (PRIMICIAS).- Agentes de la DEA y otras agencias de la ley, desmantelaron una banda de narcotraficantes, 34 de los cuales fueron detenidos, entre ellos tres dominicanos acusados de traficar miles de kilos de cocaína, heroína, fentanilo y tenencia ilegal de armas de fuego.
Los detenidos, son todos presuntos miembros de la pandilla “The Bloods” (Los Sangrientos) y los dominicanos fueron identificados como Kristian Cruz, Basilio Hidalgo y Oscar Murphy, el primero de los cuales, encabezaba supuestamente una de las más importantes rutas de suplidores.
El fiscal actuante del distrito de Brooklyn, Eric González, dijo ayer miércoles en conferencia de prensa que la pandilla, distribuía y vendía drogas altamente potentes en Brooklyn y otras partes del país.
«Esta puede ser la mayor crisis de salud pública de nuestro tiempo, estos acusados no se preocupan por la muerte y la desesperación que están causando, sino sólo a ganar dinero», dijo González.
El caso involucra supuestas ventas de furanil fentanilo, un nuevo y potente análogo de opiáceos que aún no está clasificado como una sustancia controlada bajo la ley del Estado de Nueva York, explicó el fiscal.
El año pasado, 1,350 muertos por sobredosis estuvieron relacionados con el abuso de opiáceos en Nueva York, el 28% de esas muertes en Brooklyn, triplicando la tasa de homicidios.
“Los analógicos están aumentando”, dijo el fiscal González, anunciando la acusación de 357 cargos contra 37 hombres y mujeres.
Nigel Maloney, de 49 años, de Phoenix, supuestamente fue el principal distribuidor que suministró las drogas a Warren Appolon, quien a su vez dio los narcóticos a Jerome Horton, y a Willie Billingslea, para venderlos en Brooklyn.
“Los traficantes se buscaban un millón de dólares al año, y sus operaciones se extendían desde Nueva York a Arizona y las Carolinas fueron desmanteladas después de una investigación a largo plazo que incluyó proveedores secundarios de heroína y furanil fentanilo, también conocida como «China Blanca», añadió el fiscal.
Joseph Raffone, y Cruz, el segundo residente en Manhattan, supuestamente recibieron el grueso de las drogas a través del correo de China.
Durante la investigación, se recuperaron un 2,455 kilogramos de cocaína, 1,704 kilogramos de heroína y 4,581 kilogramos de furanil fentanilo, 17 armas y $ 300,000 en efectivo.
Los acusados supuestamente hicieron sus transacciones en automóviles y vendieron a precios de $7 a $10 dólares por bolsas al detalle.
Si son declarados culpables, todos los acusados enfrentan un máximo de 20 años de prisión.